¿Cuánto tiempo necesita Irán?
13 de julio de 2006
El Gobierno iraní abre un capítulo más en el contencioso internacional entorno a su programa nuclear y pide ahora tiempo hasta agosto para dar una respuesta a la última propuesta recibida por parte de los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU y Alemania, un día después de que estos decidieran retachar el conflicto a la ONU.
El tira y afloja continúa. Si se escuchan las palabras calmadas del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, quien expresó -en rueda de prensa con la canciller alemana, Angela Merkel, en el marco de su viaja a Alemania- confianza en que la crisis iraní se resolverá por la vía diplomática, se puede pensar que el nuevo capítulo será uno de diálogo calmado.
Bush pidió a Teherán una respuesta clara y rápida al plan de incentivos que le ha ofrecido la comunidad internacional y expresó su confianza en que la crisis iraní se resolverá por la vía diplomática.
Bush no dejó de calificar de "exasperante" la actitud de Teherán en este asunto, pero precisó que en la meta por impedir que Irán se haga con el arma atómica y siga adelante con un programa nuclear no verificable la diplomacia tiene mucho que hacer aún.
"Nos hemos sentado en la mesa con los europeos y eso significa que nos sumamos a la búsqueda de una solución diplomática. Es importante que hablemos con una sola voz", dijo Bush en vísperas de la cumbre del grupo de los ocho países más industrializados del mundo, el G-8, en San Petersburgo.
Merkel se manifestó en la misma línea y dijo que la decisión de los ministros de Asuntos Exteriores de los cinco países miembros permanentes del Consejo de Seguridad, más Alemania, de remitir el caso nuclear a ese organismo, no significa que la "puerta a un acuerdo con Irán esté cerrada".
Ahmadineyad: Europa debe tener paciencia
Por su parte el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, vuelve a hacer su aparición en los medios internacionales. Instó a que Europa tenga paciencia en lo que se refiere al caso nuclear, porque "si no será el responsable de las consecuencias de la crisis que se va a originar".
Ahmadineyad expresó esta postura en un discurso pronunciado en la ciudad de Miyane, en la provincia de Azerbaiján. Reiteró que su país es partidario del diálogo, pero no acepta que éste sea injusto, según informó la televisión pública iraní.
Aludía a la decisión de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU y Alemania de remitir de nuevo el caso nuclear a este organismo internacional después de que Teherán no diera a conocer su respuesta al plan de incentivos para que los iraníes suspendan el enriquecimiento de uranio.
El Gobierno iraní, que afirma que sus actividades nucleares tienen fines pacíficos, insiste en que presentará su respuesta a la propuesta internacional en agosto próximo.