Un tribunal alemán solicita la detención del ex dictador argentino Videla
22 de enero de 2010
El cadáver del alemán Rolf Stawowiok había sido enterrado como N.N. (anónimo) en una fosa común, junto a los restos de otras cuatro personas jóvenes, el 14 de marzo de 1978 en el cementerio de Lomas de Zamora- al sur de la ciudad de Buenos Aires-, registrándose como causa de la muerte un "shock traumático agudo por herida de bala".
El 24 de agosto de 2004, el Equipo Argentino de Antropología Forense realizó la exhumación de esa sepultura con la recuperación de los restos de los cinco fallecidos. En abril de 2009, los estudios genéticos y antropológicos permitieron identificar tres de los cuerpos, entre ellos el de Stawowiok.
Este hecho hizo que se reanudase a finales de diciembre del pasado año el proceso que sobre la dictadura argentina se seguía un tribunal de Núremberg, y que había quedado suspendido en 2007 ante la imposibilidad de extraditar al ex jefe de la Junta Militar del país sudamericano Jorge Rafael Videla. Argentina rechazaba la extradición argumentando que le correspondía a un tribunal nacional llevar a cabo el juicio en su contra.
Ahora, la fiscalía de la ciudad germana reclama de nuevo a Videla para como inculpado.
Apodado "El Alemán"
Además de una orden de captura convencional, el tribunal de Núremberg emitió contra el ex dictador una solicitud de orden internacional de captura con el fin de asegurar su detención en caso de que éste viaje al exterior, precisó el portavoz judicial Thomas Koch.
La fiscalía acusa a Videla -líder de la Junta Militar entre 1976 y 1981- de asesinato y desaparición de opositores a su régimen. Organismos de derechos calculan que, entre 1976 y 1983, el terror estatal acabó en Argentina con la vida de unas 30.000 personas.
Stawowiok fue secuestrado el 21 de febrero de 1978 por un grupo de tareas de la dictadura. Tenía entonces 20 años y militaba en la Juventud Peronista. Había egresado del colegio Otto Krause, donde recibió el título de técnico químico, y lo apodaban "El Alemán".
Videla fue condenado a cadena perpetua en 1985 por violaciones contra los derechos humanos durante el tiempo que estuvo a la cabeza de la Junta, pero fue amnistiado en 1990 por el entonces presidente Carlos Saúl Menem, quien hizo uso de la facultad presidencial de indulto para dictar su excarcelación.
En 1998, Videla regresó a prisión. Luego se le concedió el derecho al arresto domiciliario por su edad, privilegio que perdió en octubre de 2008, por lo que fue trasladado a la cárcel de Campo de Mayo, principal base militar de la Argentina, donde permanece actualmente. (dpa)
Editora: Luna Bolívar Manaut