Buscador de oro halla una pepita valorada en 160.000 dólares

Un buscador de oro aficionado australiano ha encontrado, con un simple detector de metales de 1.200 dólares australianos, una enorme pepita de oro de 4,6 kilos y valorada en más de 160.000 dólares estadounidenses. La enorme roca fue descubierta en el estado de Victoria, en una zona conocida como el "Triángulo de Oro".

El aficionado llevó el espécimen, llamado "Lucky Strike Nugget", a la valuadora Lucky Strike Gold a finales del año pasado y donde el propietario de la tienda, Darren Kamp, la revisó y evaluó. El tasador afirmó que en su amplia carrera de 43 años nunca había visto nada parecido. El experto está acostumbrado a que la gran mayoría de rocas que le presentan, supuestamente con oro, no tienen ningún valor. El explorador aficionado le preguntó si creía que podría tener un valor superior a los 6.000 euros - aún más grande fue la sorpresa cuando Kamp afirmó que el valor seguramente sería mucho mayor.

Según Kamp, la roca estaría muy sucia. Su dueño la partió en dos pensando que podría encontrar oro en su interior, pero la sorpresa fue que al limpiarla "se podía ver el oro saliendo de la roca por todas partes".

Australia y su larga historia con los cazafortunas

"Ves grandes especímenes encontrados por grandes compañías bajo tierra... pero encontrar uno así con un detector... Es el más grande que he visto en mi vida", dijo Darren Kamp. El mayor espécimen de oro que ha encontrado Kamp era una pieza de 24 onzas, que ahora valdría unos 70.000 dólares australianos. Cuenta que hace unos 10 años su amigo encontró una pepita de oro de 600 onzas.

Australia es conocida por sus extensas reservas de oro. Muchas de las pepitas más grandes del mundo se han encontrado allí. En 2020, unos buscadores de oro del sur de Australia encontraron en unos yacimientos históricos dos pepitas enormes valoradas en 350.000 dólares australianos (250.000 dólares estadounidenses). En 2013, un otro buscador halló una roca que valdría al menos 300.000 dólares estadounidenses.

La caza por el oro comenzó en Australia en la década de 1850, después del descubrimiento de ricos yacimientos de oro en la región de Victoria. Muchas de las pepitas encontradas en este tiempo eran de gran tamaño. La más grande, llamada "pepita Holtermann", pesaba más de 90 kilos.

Editado por Isabella Escobedo