La inflación del 114% en Argentina está produciendo un fenómeno en apariencia contradictorio. Sube el consumo en recreación y cultura, mientras las calles se llenan de gente durmiendo a la intemperie: 34% más "sin techo" que en 2022. La falta de acceso a bienes durables y ahorro y la llamada "economía barrani" explican una parte del fenómeno.