El Ejército alemán y las denuncias por extremismo de derecha

Cerca de 550 soldados del Ejército alemán están siendo investigados por sospecha de extremismo de derecha; solo en 2019 los casos sumaron 360. Las cifras dadas a conocer por el jefe del Servicio de Inteligencia del Ejército de Alemania (MAD), Christof Gramm, conmocionan a la clase política y a la opinión pública. Esto se ve agravado por la cifra de casos sospechosos de extremismo de derecha en el comando de élite KSK, hasta cinco veces más alta que en las tropas regulares.

Señal de alarma

Las cifras son ahora la comidilla de la oposición en el Parlamento. El partido La Izquierda dice reconocer "redes de extrema derecha en la Bundeswehr”, y habla de una "cultura de hacer la vista gorda y de la banalización” del peligro que representa la ultraderecha en el Ejército. Para Los Verdes, está claro que los soldados denunciados deben ser alejados de la tropa con mayor celeridad que hasta el momento. El jefe de Los Verdes en la comisión de Defensa del Parlamento, Tobias Lindner, dijo a DW que "la magnitud de los problemas muestra que se debe actuar de forma más sistemática contra el extremismo de derecha en el Ejército”. Además, añadió, la capacitación de los soldados debe priorizar la formación política.

El Ministerio de Defensa quiere aplacar los ánimos

Arne Collatz, portavoz del Ministerio alemán de Defensa, dijo: "No hay tolerancia para el extremismo en nuestra organización”. Asimismo, explicó las elevadas cifras diciendo que dentro del Ejército alemán y del MAD se está desarrollando una "nueva sensibilidad” respecto del tema. Según él, hay "una gran cantidad de denuncias desde dentro de las tropas”, y el servicio de contraespionaje trata los casos de la manera apropiada.

De hecho, la exministra de Defensa Ursula von der Leyen hizo cambios fundamentales en la cultura de la Bundeswehr y, sobre todo, del MAD, no bien se conocieron los primeros casos sospechosos. Desde entonces hay menos militares y más civiles en la cúpula del servicio secreto, que pertenece al área del Ministerio de Defensa. Mientras anteriormente se decía en círculos parlamentarios que los uniformados del MAD eran demasiado indulgentes con los soldados ultraderechistas, ahora varios políticos del área de Defensa perciben un nuevo espíritu, más consecuente y abierto al respecto.

¿Ha cambiado el servicio secreto del Ejército alemán?

Christof Gramm, alto funcionario y jurista, dirige el MAD desde hace exactamente cinco años. Lo secunda en sus tareas el vicepresidente de la organización, Burhard Even, que anteriormente se desempeñaba en la Oficina de Protección a la Constitución. Con Gramm, el MAD fue elevado a la categoría de instancia gubernamental superior, lo que le posibilita publicar un informe anual, el cual presentará por primera vez este año. Hasta ahora, los informes del MAD solo eran accesibles para un pequeño grupo de políticos especializados del Parlamento, que no debían dar a conocer ningún dato a la opinión pública.

Sin embargo, Caroline Walter duda de que ahora el Ejército alemán y el MAD se hayan vuelto más abiertos. Walter es coautora de "Extrema seguridad”, un libro que trata sobre el extremismo de derecha en la Bundeswehr, en la Policía y en la Oficina de Protección a la Constitución. "El problema en el Ejército alemán”, dijo a DW, "es que aquel que denuncia a los extremistas de derecha sigue siendo un traidor que atenta contra un supuesto espíritu de camaradería dentro de ese cuerpo”. Por eso, piensa la autora, las cifras dadas a conocer ahora "son solo la punta del iceberg”. Según ella, el MAD se debe seguir profesionalizando más para poder desenmascarar a la sutil "nueva extrema derecha” dentro de las filas del Ejército. "Es mucho más difícil comprobar esos casos porque ya no sueltan burdos lemas radicales y no postean fotos de Hitler en WhatsApp”.

(cp/ers)

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