Nueva ofensiva mata a casi un centenar de personas en Siria
2 de febrero de 2014
Toneles rellenos con explosivos. Eso son las famosas “bombas de barril” que lanzan las fuerzas gubernamentales en los combates contra los rebeldes en distintas zonas de Siria. Esta vez los helicópteros del régimen atacaron Alepo con esos artefactos improvisados, causando la muerte de al menos 90 personas, entre los que hay 13 niños. La mayoría de las víctimas son civiles.
Así lo informó este domingo (02.02.2014) el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, una organización con una enorme red de corresponsables y fuentes esparcida por Siria. La última ofensiva militar, que comenzó el viernes 31 de enero, ha afectado principalmente a civiles. Ya antes defensores de los derechos humanos han criticado el uso de estas bombas, por causar daño indiscriminado sin distinguir objetivos militares de civiles.
Incluso más: en las recientes rondas de conversaciones de paz en Ginebra, el uso de estas armas fue cuestionado por la comunidad internacional. Las potencias occidentales propusieron en diciembre de 2013 una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU para expresar su indignación por su uso, que han matado a más de 700 personas en las últimas seis semanas. Sin embargo, Rusia bloqueó la iniciativa.
Enfrentamientos en todo el país
Según el Observatorio Sirio, las mismas bombas fueron utilizadas en suburbios de Damasco. Las fuerzas armadas bajo el mando de Al Assad también habrían atacado otras ciudades del país. El régimen asegura combatir a terroristas, aunque el ataque denunciado este domingo en Alepo fue directamente dirigido sobre varias zonas residenciales que estarían bajo control rebelde.
Los insurgentes y las tropas gubernamentales combaten hace meses por el control de Alepo, antaño una ciudad que operaba como centro financiero del norte del país. Una parte de la urbe está en manos de cada bando, aunque en las últimas semanas el Ejército parece ir ganando terreno a los milicianos. Los rebeldes, de hecho, están divididos internamente y suele haber combates entre grupos islamistas y rebeldes moderados.
Los milicianos también han protagonizado combates contra soldados sirios en las afueras de la ciudad de Ein Assan, con bajas en ambas partes, mientras que cuatro militares han perdido la vida en enfrentamientos entre miembros del ISIS, un grupo vinculado a Al Qaeda y que también opera en Irak, y del Ejército sirio en la ciudad de Al Sfeira.
DZC (Reuters, dpa, Europa Press)