Mueren tres soldados en centro comercial de Nairobi
24 de septiembre de 2013Tres soldados kenianos murieron durante los enfrentamientos para tratar de liberar por completo el centro comercial Westgate en Nairobi, anunció el Ministerio del Interior en la red social Twitter. El ministerio añadió que las fuerzas de seguridad siguen "peinando" el edificio.
Poco antes, el portavoz del gobierno, Ezekiel Mutua, había asegurado que "la operación está en su fase final". Las autoridades señalaron ya durante la noche del lunes que habían liberado a los últimos rehenes que se creía estaban en poder de la milicia Al Shabaab y que no había resistencia de los atacantes, después de una serie de disparos y explosiones durante el día, pero que las fuerzas de seguridad mantenían su cautela en caso de que algunos atacantes estuviesen ocultos en el edificio. No obstante, esta mañana, seguían oyéndose disparos procedentes del edificio.
"Nuestras fuerzas recorren todo el centro comercial, piso por piso, para asegurarse de que nadie haya quedado atrás", afirmó en Twitter el Ministerio del Interior, que además confirmó la muerte de tres de los entre 10 y 15 secuestradores vinculados con Al Qaeda. Las autoridades han detenido y están interrogando a diez personas.
Al menos 62 personas murieron y 175 resultaron heridas en el ataque. Más de 200 civiles fueron rescatados del centro comercial. Sin embargo, según la Cruz Roja, 63 personas continúan desaparecidas. Los gobiernos de Canadá, Francia, Reino Unido, Sudáfrica, Holanda y Estados Unidos confirmaron que hay ciudadanos de sus países entre los muertos o heridos. Otras víctimas conocidas provienen de China y Ghana.
¿Nacionalidades de los secuestradores?
El jefe del Ejército, general Julius Karange, afirmó que el atentado fue cometido por un grupo "multinacional", pero se negó a confirmar las nacionalidades de sus integrantes.
La ministra de Exteriores keniana, Amina Mohamed, afirmó a la televisión pública estadounidense que entre los asaltantes había "dos o tres norteamericanos" muy jóvenes, de unos 18 y 19 años, y una mujer británica. Los estadounidenses son de origen somalí pero "vivían en Estados Unidos, en Minnesota y otro lugar", afirmó Mohamed a PBS. Sobre la británica, dijo que no era la primera vez que participaba en un acto terrorista. "Creo que lo hecho varias veces antes", lo que subraya la naturaleza internacional del terrorismo y muestra que los gobiernos tienen que coordinarse mejor para combatirlo, consideró.
La portavoz del Departamento de Estado norteamericano, Jen Psaki, se negó a confirmar esta versión y aseguró que se está investigando. "En este momento no tenemos pruebas determinantes sobre las nacionalidades o identidades de los atacantes", indicó al Washington Post.
Un portavoz de Al Shabaab se atribuyó la responsabilidad por la operación -muy coordinada con granadas y armas automáticas- y aseguró que no negociarán con el gobierno. La fuente afirmó a una emisora de radio en Somalia que los combatientes que quedan lucharán hasta el final, al tiempo que calificó la masacre como parte de la yihad (guerra santa) global. Fuentes de la oficina de prensa de Al Shabaab aseguraron asimismo a la agencia de noticias británica Reuters que los secuestradores aún tienen rehenes vivos en su poder, y que quienes aseguran que estadounidenses y británicos se hayan entre los atacantes "no saben lo que está pasando en el edificio Westgate".
Obama ofrece respaldo
Entretanto, el presidente Barack Obama, cuyo padre nació en Kenia, ofreció a los keniatas el apoyo de Estados Unidos, diciendo que él cree que Kenia -vecina de la caótica Somalia- seguirá siendo un pilar regional de estabilidad. Kenia ha enviado soldados a Somalia como parte de una fuerza de la Unión Africana que intenta estabilizar al país, que durante largo tiempo estuvo sin un gobierno en funciones, y hacer retroceder a Al Shabaab. La milicia somalí se haya vinculada a Al Qaeda, que ya mató a más de 200 personas cuando bombardeó la embajada de Estados Unidos en Nairobi en 1998.
Frecuentado por keniatas y extranjeros acomodados, el centro comercial Westgate representa la bonanza de consumo que está atrayendo la inversión extranjera -de Occidente y Oriente- a una de las regiones de crecimiento más rápido del mundo. Así que cuando combatientes de sus homólogos de Somalia entraron al centro comercial el sábado, golpearon un símbolo de alto perfil del poder económico de Kenia.
El presidente Uhuru Kenyatta, quien perdió a un sobrino en la matanza del fin de semana, ha rechazado una demanda para que retire a las fuerzas de su país desde Somalia, diciendo que no cederá en su "guerra contra el terrorismo".
rml (dpa, reuters, tageschau, ap)