Las inundaciones en el sur de Brasil, vistas desde el aire
Las lluvias diluvianas que afectaron al sur de Brasil provocaron inundaciones catastróficas en el estado de Rio Grande do Sul. Las tomas aéreas muestran la región afectada, cuya reconstrucción se prevé complicada.
Una masa de agua en el aeropuerto
Durante semanas, lluvias torrenciales cayeron sobre el estado sureño de Rio Grande do Sul, en Brasil. Numerosas ciudades y regiones quedaron hundidas bajo el agua, incluido el aeropuerto internacional de Porto Alegre. Más de 150 personas murieron y otras 100 siguen desaparecidas. "El peor episodio climático de la historia de Brasil", afirma Sebastião Melo, alcalde de la ciudad de Porto Alegre.
En bote por las calles de Porto Alegre
En la ciudad de Porto Alegre, situada a orillas del río Yacuí, los equipos de rescate tuvieron que evacuar a los residentes en barcos. Actualmente viven allí unas 30.000 personas en casi 150 alojamientos de emergencia. Una de ellas es Marcia Leal, de 50 años. Ya ha sufrido tres inundaciones. "Luchas para recuperar todo y luego vuelve a desaparecer", dice.
Inundaciones hasta donde llega la vista
Reconstruir la región es una tarea verdaderamente hercúlea. El agua se extiende hasta el horizonte en Canoas, a unos 20 kilómetros al norte de la inundada Porto Alegre. La magnitud total de los daños sólo será visible una vez que el agua se haya drenado. Las ciudades necesitan dinero, experiencia y nuevas tecnologías para estar mejor preparadas para las inundaciones del futuro.
Cuando los diques y presas no protegen
Porto Alegre, la capital del estado afectado, cuenta con una protección integral contra inundaciones, con diques, presas y un enorme muro. Sin embargo, el sistema de los años 70 está obsoleto y no entró en contacto con el agua de las inundaciones hasta 2019, informa Leomar Teichmann, ingeniero de drenaje urbano. Los habitantes de la metrópoli tenían una falsa sensación de seguridad.
El estadio Beira-Rio, rodeado de agua
El fútbol es el deporte nacional de Brasil. En 2014 se jugó la Copa Mundial de Fútbol en el estado Beira-Rio de Porto Alegre, ante más de 50.000 espectadores. Luego de las graves inundaciones, el monumental estadio con forma de anillo está rodeado por dentro y por fuera de aguas fangosas de color marrón rojizo.
Destrucción, barro y suciedad
Las inundaciones también afectaron a la pequeña ciudad de Encantado, a orillas del río Taquari. El barro arrastrado por las aguas no solo cubre las calles y los automóviles, sino también los sistemas de desagüe de todas las ciudades y localidades inundadas en la región. Si no se los limpia a tiempo, nuevas lluvias podrían volver a taparlos y eso provocaría nuevas inundaciones.
La magnitud de la tragedia
Una imagen satelital muestra la dimensión de la catástrofe provocada por las lluvias torrenciales en Porto Alegre. Las personas afectadas podrían sufrir de un miedo permanente a nuevas inundaciones, según la psicóloga Marta Fadrique.