La Ópera del Margrave, joya barroca de Bayreuth
En ningún otro lugar la cultura y la acústica de un escenario barroco se percibe con tanta autenticidad como en Bayreuth: en la Ópera del Margrave, Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO desde 2012, recién restaurada.
Obra de arte completa
La Ópera de Bayreuth fue construida entre 1746 y 1750 por el arquitecto teatral más importante de Europa en esa época, Giuseppe Galli Bibiena, y su hijo Carlo. En 2012, la UNESCO otorgó a la Ópera el título de Patrimonio de la Humanidad como el ejemplo más importante y mejor conservado de la cultura teatral barroca. Ahora se reabre, tras su restauración.
El proyecto favorito de las margravinas
El encargo de construir la edificación lo dio la margravina Wilhelmine von Brandenburg-Kulmbach, quien quería transformar a Bayreuth en una majestuosa metrópoli cultural. Su pasión era precisamente la música.
A la altura de los mejores de Europa
El revestimiento de oro ostentoso domina en su interior. Y en el centro, el palco real. En cuanto al tamaño y esplendor del lugar, la ingeniosa Wilhelmine se inspiró en los grandes teatros europeos de su época como los de Viena, Dresde, París y Venecia.
Teatro Musical Barroco
En 1748, el teatro fue inaugurado con motivo de la boda de la única hija de Wilhelmine, con la interpretación de la ópera italiana "Artaserse", de Johann Adolph Hasse. Además de las presentaciones de ópera, el teatro barroco también celebró majestuosos festivales y bailes. Y sigue siendo un vibrante lugar de espectáculos .
Riqueza en detalles
Los palcos del teatro, hechos completamente de madera, también son considerados únicos en el mundo por sus exquisitas decoraciones talladas y pintadas. Wilhelmine buscaba solo lo mejor. Hasta el día de hoy, el teatro se ha conservado en su forma original.
Los palcos
En tiempos de Wilhelmine, las velas iluminaban las filas de palcos. A finales del siglo XIX, el rey bávaro Luis II, aficionado a la tecnología, hizo instalar la primera iluminación eléctrica. La Ópera del Margrave también fue la razón por la que Richard Wagner llegó a Bayreuth, aunque al final resultó ser un lugar inadecuado para sus ideas escénicas.
Preservación del original
Antes de la remodelación general, un barniz oscuro era dominante en el interior. Surgió, entre otras cosas, por restauraciones fallidas del siglo XX. Una vez eliminadas las capas de pintura añadidas posteriormente, el interior brilla con nuevo esplendor este año.
Como en la época de Wilhelmine
En el transcurso de los trabajos de restauración, accesorios de la década de 1930 también fueron retirados del escenario. De este modo, los visitantes podrán experimentar, desde la reapertura del 12.4.2018, de un teatro de ópera casi como en la época de Wilhelmine.