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La amistad germano-israelí

29 de abril de 2004

El presidente israelí, Moshe Katsav, visita Alemania, donde se ha reunido con las máximas autoridades. Con este motivo les ofrecemos un repaso a la historia de las relaciones entre ambos países, con su particular sello.

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El presidente alemán y el israelí, Johannes Rau y Moshe Katzav.Imagen: AP

Al término de la II Guerra Mundial, Alemania era sólo un lugar de horror para los judíos. Los pocos que sobrevivieron al Holocausto abandonaron, en su mayoría, el país. Israel se convirtió en su nueva patria. El joven Estado, fundado en 1948, difícilmente podía concebir la posibilidad de entablar relaciones cordiales con Alemania. Pero eso fue precisamente lo que se propuso conseguir el primer canciller germano federal, Konrad Adenauer.

Difíciles comienzos

En un comienzo, el gobierno israelí rehusó cualquier contacto. Adenauer tuvo que hacer un rodeo, entablando conversaciones con organizaciones judías sobre indemnizaciones. Sin embargo, poco a poco, comenzaron a establecerse también contactos directos entre ambos países. Tras largas negociaciones se firmó, en 1952, el Acuerdo de Luxemburgo, en virtud del cual el gobierno alemán se comprometió a pagar compensaciones a Israel, en dinero y otros bienes o servicios. Su monto ascendía, hasta fines del 2000, a cerca de 55 mil millones de euros.

Con las indemnizaciones, llamadas en Israel "Shilumim" (pagos), se dio al menos un primer paso de acercamiento. No obstante, aún no se vislumbraba el establecimiento de relaciones diplomáticas. Por otra parte, el conflicto entre israelíes y palestinos también afectaba las relaciones con Alemania, que mantenía vínculos cordiales con países árabes.

Hito histórico

Dr. Konrad Adenauer und Ben Gurion in Israel
Adenauer, Ben Gurion y Aba Eban en Israel, en mayo de 1966.Imagen: AP

Pese a todo, los lazos de amistad germano-israelíes siguieron desarrollándose, lenta pero sostenidamente. En 1960 se logró el primer éxito: Adenauer y el primer ministro de Israel, David Ben Gurion, se reunieron en el hotel Waldorf Astoria, en Nueva York. Ambos políticos calificaron ese encuentro como un hito histórico.

Pero fue el canciller alemán Ludwig Erhard quien consiguió, finalmente, coronar los esfuerzos de años y acordar, con el premier Levi Eshkol, el establecimiento de relaciones diplomáticas. Erhard estuvo dispuesto a pagar el precio de que varios países árabes reaccionaran rompiendo sus vínculos con Alemania.

Diplomacia viajera

Desde entonces, las relaciones germano-israelíes han seguido profundizándose permanentemente. Aunque de tanto en tanto la historia de la época nazi y los actuales problemas de antisemitismo enturbien el panorama, hoy en día puede hablarse con propiedad de una amistad entre Alemania e Israel.

En ese marco se han llevado a cabo numerosas visitas de estado. Más de 20 políticos alemanes han visitado Israel en el último tiempo, entre ellos el ministro de Relaciones Exteriores, Joschka Fischer, quien ha acudido en 7 ocasiones a ese país. Pero ambos estados no colaboran sólo en el terreno político. Alemania se ha convertido en el segundo socio comercial de Israel, después de Estados Unidos. En cambio, el intercambio cultural se ha dificultado en los últimos años, debido a los problemas de seguridad existentes en Israel.