Inseguridad en Irak frena a las empresas
2 de abril de 2004De acuerdo con declaraciones de Peter Göpfrich, director gerente de la Cámara de Industria y Comercio Germano-Árabe, en el "pool" participarán en un principio quince empresas. Debido a las largas relaciones comerciales entre Alemania e Irak, allí "el 80% de la infraestructura tiene componentes alemanes", agregó.
Gobierno alemán llama a invertir
A pesar de la precaria situación de seguridad y de los atentados casi diarios, en opinión del gobierno alemán Irak es "uno de los mejores lugares para realizar inversiones", dijo Alfred Tacke, subsecretario de Estado de economía.
Por su parte, Abdul Amir Al-Abood, ministro iraquí de agricultura, llamó a las empresas alemanas a redoblar sus inversiones en su país, sobre todo en el sector agrícola, en el que empresas nuevas no pagan ni aranceles aduaneros ni impuestos durante los primeros cinco años.
"El principal obstáculo para las inversiones en Irak es la inseguridad, ya que debido al peligro de atentados terroristas y el crimen es difícil entablar contactos de negocios en el país", subrayó empero Jochen Münker, jefe del departamento de Cercano y Próximo Oriente de la Asociación Alemana de Cámaras de Comercio e Industria.
Pocas perspectivas
"Actualmente no estamos trabajando en Irak y tampoco contamos con que podamos hacerlo en un futuro próximo", dijo Frank Kehlenbach, director gerente de la Asociación de la Industria Alemana de la Construcción.
Los problemas son enormes sobre todo para las empresas medianas, que no pueden costear los gastos en medidas de seguridad que eventualmente pueden pagar los grandes consorcios. Para entablar nuevos contactos es también importante hallar socios iraquíes con mano de obra local. "En el mundo árabe, el contacto personal es decisivo para el éxito de un negocio", subrayó Münker.
Por la magnitud del problema de la seguridad se aplazó también en Bagdad la realización de la exposición "Destination Baghdad Expo", planeada para cuatro días. Una nueva fecha no ha sido fijada aún. En la exposición iban a tomar parte más de 200 empresas de 26 países, entre ellas las empresas más importantes que participan actualmente en la reconstrucción dirigida por la administración de ocupación estadounidense.