Gran Bretaña presenta armamento del futuro

Los expertos militares coinciden en que las guerras del futuro serán dominadas por las máquinas. Aviones no tripulados (llamados zánganos) se hallan ya en uso por ejemplo en Afganistán. Recientemente, un zángano estadounidense, dotado de cámaras y cohetes mató líderes talibanes en la frontera con Pakistán.

Pero los militares quieren ir más allá y se imaginan robots patrullando en ciudades, vehículos sin conductor que transportan equipo y sacan heridos de los lugares de combate y pequeños tanques fuertemente acorazados que llevan efectivos al frente.

El ministerio de Defensa de Gran Bretaña acaba de mostrar cómo podría verse ese futuro. En la presentación del “Estrategia de Tecnología de Defensa”, los británicos no se limitaron a exhibir dibujos y maquetas, sino que hicieron circular también un robot bautizado “Testudo” en la sala donde se llevó a cabo la conferencia de prensa, según informa la revista alemana “Der Spiegel”.

Un tanque en la mochila

Según los militares, el “Testudo” entra en una mochila y puede avanzar sobre el terreno a 70 km por hora, comandado a distancia. Dotado de cámaras, podría realizar tareas de esclarecimiento sin que para ello soldados deban poner en peligro su vida.

Presentada fue también una masa viscosa llamada “D30” de “moléculas inteligentes”, que se solidifica rápidamente cuando es impactada por un objeto a alta velocidad. Los investigadores que desarrollaron el producto se embadurnaron con él durante la conferencia de prensa y permitieron que los periodistas les pegaran con palas, por cierto sin consecuencia alguna para su salud.

Con su “Estrategia de Tecnología de Defensa”, el ministerio de Defensa británico quiere también diversificar los encargos y las licitaciones. En el futuro, dijeron los militares, los encargos no irán solo para los grandes grupos de producción de armamento, sino que se impulsará también la investigación militar en pequeñas empresas e incluso universidades.

Página web para “subir” ideas

Para ello crearán incluso una página web, a la que podrán “subirse” ideas a través de Internet. La investigación de ideas no convencionales también será apoyada financieramente. Para ello se ha creado un fondo de unos 2,2 millones de euros.

Este tipo de iniciativa también ha despertado y sigue despertando críticas en el sentido de que en el futuro las máquinas no sólo podrán ser utilizadas como asistentes, sino decidir también autónomamente sobre la vida y la muerte.

Quentin Davis, responsable de adquisición de equipamiento militar en el ministerio de Defensa británico, intentó disipar esos temores: “no sacaremos al ser humano del proceso de toma de decisiones, sino que intentaremos poner a su disposición tanta información, fuerza de fuego y protección como sea posible.”