Ejecución en Navidad: el final del dictador Ceausescu
El juicio abarcó aproximadamente una hora. Nicolae Ceausescu y su esposa fueron ejecutados inmediatamente después, el 25 de diciembre de 1989. Una serie de fotos de Anton Roland Laub muestra los escenarios del suceso.
Ante el paredón de ejecución
Los orificios de las bala todavía se pueden apreciar bien. Incluso después de 30 años. Nicolae y Elena Ceausescu fueron ejecutados ante este muro. El juicio tuvo lugar en una base militar en la ciudad rumana de Târgoviște. Anton Roland Laub dedicó una serie de fotos tituladas "Last Christmas" a este lugar, que se mostraron en Berlín como parte de la exposición "Lugares sagrados y malditos".
Un fotógrafo buscando las huellas del pasado
"Mi trabajo se basa en la investigación y también está motivado autobiográficamente", dice el fotógrafo, que nació y creció en Bucarest y ahora vive en Berlín. "Al igual que la caída del Muro de Berlín, seguí el comienzo de la revolución rumana en la radio, en la BBC, Radio Free Europe, Voice of America y en DW. Fueron momentos muy intensos, me marcaron", afirma.
Censura de los medios de comunicación
Esta vieja televisión en blanco y negro todavía se puede ver en el edificio donde tuvo lugar el juicio de los Ceausescu. Durante la dictadura, solo había una cadena de televisión transmitiendo aproximadamente 2 horas al día. Esta difundía la propaganda del régimen. Los canales extranjeros, a través de los que Anton Roland Laub se enteró del comienzo de la revolución, se veían en secreto.
El poder de Ceausescu parecía inquebrantable
En noviembre de 1989, después de la caída del Muro de Berlín, Ceausescu fue reelegido oficialmente en el XIV Congreso del Partido Comunista Rumano. Naturalmente, por unanimidad. En ese momento era difícil imaginar el fin de su gobierno.
Proceso controvertido, cuestiones pendientes
Nicolae y Elena Ceausescu se sentaron aquí durante el juicio. "El decreto que convocaba el tribunal se firmó el 27 de diciembre, cuando la pareja llevaba dos días muerta", dijo Laub. Hoy, los rumores y las intrigas envuelven esos días violentos de diciembre y aún se plantea la pregunta: ¿fue un levantamiento popular o un golpe de Estado organizado?
"El soldado ideal"
El artista describe a este muñeco sin cabeza, con el viejo uniforme del Ejército rumano de la época de la dictadura comunista, como "El soldado ideal". Treinta años después, "sigue habiendo un muro de silencio que bloquea la justicia".
El supuesto "Genio de los Cárpatos"
En un estante se pueden ver "obras seleccionadas" de Ceausescu, supuestamente escritas por él. "Sin embargo, circularon rumores de que fueron redactadas por escritores fantasmas, porque Ceausescu era considerado analfabeto. Ni siquiera podía leer sus discursos correctamente", escribe Laub como explicación de esta foto. Irónicamente, el dictador quería que lo llamaran el "Genio de los Cárpatos".
Las últimas noches de los Ceausescu
"No soy una persona religiosa, pero lo que también me interesó fue el contraste: que en el día de Navidad, un día sagrado, por así decirlo, se cometiera un pecado mortal", dice Anton Roland Laub. "¿Por qué la pareja de dictadores no tuvo un juicio civilizado? Esto no terminó con los enfrentamientos en las calles. Al contrario, el número de víctimas aumentó después de la ejecución", explica.
Sin revisión histórica
El viejo escudo de armas del periodo de Ceausescu cuelga junto a la entrada del baño en el edificio en Târgoviște. Los sucesos de 1989 se juzgarán ahora ante los tribunales de Rumania.