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Duras acusaciones entre Austria y Hungría por los refugiados

12 de septiembre de 2015

Austria y Alemania esperan una nueva ola de refugiados y la ciudad de Múnich se dice "desbordada" por su llegada. Mientras, se recrudece el enrarecimiento de relaciones entre Austria y Hungría.

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El canciller austríaco, Werner Faymann.
Imagen: imago/Eibner Europa

El Gobierno húngaro calificó hoy (12.09.2015) de "calumnias inconscientes" las declaraciones del canciller austríaco, Werner Faymann, en las que identifica la postura de Budapest en la crisis de los refugiados con las épocas más oscuras de Europa, en referencia al Holocausto nazi. En una entrevista que publica hoy la revista alemana Der Spiegel, el primer ministro austríaco señala que la política de su homónimo húngaro, Viktor Orbán, es irresponsable, porque considera que los refugiados lo son por razones económicas. En sus declaraciones a Der Spiegel, Faymann llega a plantear que la UE establezca sanciones para países que no cumplan los principios de solidaridad".

El ministro de Exteriores húngaro, Péter Szijjártó, consideró que estas declaraciones "van más allá de lo admisible". Szijjártó reiteró que Hungría cumple con todas sus obligaciones comunitarias y criticó a los políticos que, como el canciller austríaco, crean con sus declaraciones "ilusiones falsas" en los inmigrantes. El ministro húngaro opinó que Faymann se expresó así para lograr más apoyo político en su país, en alusión a las próximas elecciones regionales que se celebrarán en Viena y otras regiones de Austria. Ministerio de Exteriores húngaro informó hoy de que ha convocado al embajador austríaco en Budapest para pedirle explicaciones sobre las declaraciones de Faymann y protestar por ellas.

Reabierto el paso fronterizo entre ambos países

Las relaciones diplomáticas entre Hungría y Austria se han enrarecido en las últimas semanas y los dos países se acusan mutuamente de no cumplir con las obligaciones que derivan del acuerdo de Schengen, que regula la libre circulación en 26 Estados europeos. El presidente húngaro, Viktor Orbán, dijo al diario alemán Bild que él acogería a una familia de refugiados en su propia casa si estuviera seguro de que esto no iba a animar a otros a hacer el viaje a Europa. Orbán aseguró que su esposa y sus hijos ya ayudaban activamente a los refugiados.

Por otro lado, Austria reabrió esta mañana al tráfico la autopista por el paso fronterizo de Nickelsdorf, que separa el país de Hungría, tras cerrarlo el viernes ante la masiva llegada de refugiados desde el país vecino. Desde la media noche de hoy, unos 460 refugiados cruzaron la frontera desde Hungría por Nickelsdorf, informó la policía. La mayoría continúa su viaje a través de Salzburgo directamente a
Alemania.

Nueva ola de refugiados y Múnich "desbordada"

Las autoridades austríacas consideran que en los próximos días llegará al país un nuevo contingente de miles de refugiados y consideraron realistas los cálculos de que 40.000 personas se dirigen hacia los países ricos de Europa a través de la llamada ruta de los Balcanes. Por su parte, las autoridades alemanas se preparaban este fin de semana para la llegada de una nueva ola masiva de refugiados.

La ciudad de Múnich, en el sur de Alemania, se declaró hoy desbordada y sin camas suficientes ante la llegada de miles de refugiados en las últimas horas y la previsión de que sigan los flujos migratorios desde Asutria todo el fin de semana. "Ya no sabemos qué podemos hacer con los refugiados", declaró a la prensa el alcalde de la capital de Baviera, el socialdemócrata Dieter Reiter, quien reclamó a los otros estados federados que asuman también su responsabilidad.

MS (dpa/efe)