Draghi mantiene su curso
2 de junio de 2016Después de reunirse en la capital de Austria, el consejo del Banco Central Europeo (BCE) mantuvo su paquete de medidas tal y como esperaban los analistas. “Tenemos que esperar el efecto completo de las medidas”, explicó el presidente del BCE, Mario Draghi, sobre el paquete aprobado en marzo.
Entonces, el BCE rebajó la principal tasa de interés al 0% para estimular la economía europea. Además, Draghi se refirió al plan aprobado que comenzará a aplicarse en junio y que, aparte de la deuda pública, contempla también la compra de bonos de empresas. Un programa cuantificado en 1,74 billones de euros que tendría vigencia hasta marzo de 2017.
A mucha distancia del valor ideal
Pese a las críticas desde Alemania, con este movimiento de compra los guardianes del euro quieren animar a los bancos para que ofrezcan más crédito a disposición de la economía. Eso impulsaría la coyuntura económica y la inflación, todavía demasiado baja para el BCE.
En Alemania, el aumento de los precios en mayo fue solo del 0,1%, pero parece que la situación está mejorando poco a poco. El precio del barril de petróleo volvió a superar la marca de los 50 dólares y eso provocaría un aumento de la inflación y podría convertir en realidad los pronósticos del banco emisor.
¿Volverá la inflación?
El BCE corrigió ligeramente al alza su previsión de inflación para este año (0,2%) y mantuvo sus pronóstico de alcanzar el 1,3% en 2017. Si el precio del petróleo continúa subiendo, podría llegar al 1,5 o 1,7%.
Con estas cifras, los críticos podrían exigir a Mario Draghi que terminase con esa política monetaria de interés cero. Algunos miembros del Consejo, como el director del Bundesbank alemán, Jens Weidmann, exigen que el BCE solo mantenga abierto el grifo del dinero durante el tiempo estrictamente necesario. Sin embargo, no está claro que el precio del crudo y la inflación sigan en ascenso. La Agencia Internacional de la Energía prevé que habrá menos oferta de crudo hasta 2017. A partir de ahí, con los precios por encima de la barrera de los 50 euros, el fracking volverá a ser rentable y la tendencia al alza podría estancarse.
Calma en los mercados
Tras la conferencia de Viena, está claro que habrá que esperar para escuchar la señal que indique el fin de esta política monetaria. Además, anticipar esos cambios en el tipo de interés podría generar turbulencias, como sucedió con la FED estadounidense en 2013.
Pero una cosa sí se puede reconocer sobre el Banco Central Europeo y su política monetaria: que no tiene influencia suficiente en la inflación, ni en la concesión de créditos a los bancos ni en la coyuntura. Para eso el precio mundial del petróleo parece ser una palanca mucho más efectiva. Y en él no puede influir ningún banco emisor del mundo.