Comienzan en Bonn cruciales negociaciones climáticas

Deutsche Welle: Naciones Unidas coordina las negociaciones que se llevarán a cabo en la Conferencia sobre el Clima de París en noviembre de 2015. ¿Cuáles son los mayores obstáculos que se encontrarán en su camino a la capital de Francia?

Janos Pasztor: Estamos en el medio año decisivo. A partir de este 1 de junio, estaremos dos semanas negociando en la ciudad alemana de Bonn. Será una etapa crucial para ver dónde estamos y cuánto trabajo nos queda por delante. Como saben, tenemos un borrador de la declaración final, de 86 páginas. Todavía hay muchas opciones, posibilidades de selección y textos entre paréntesis. En la reunión de junio se debatirá sobre la posibilidad de que los Estados decidan qué opciones son susceptibles de ser eliminadas del borrador, para hacer más accesible el texto. Deberíamos quedarnos sólo con los puntos críticos, que serán los susceptibles de ser debatidos durante la segunda mitad del año.

¿Habrá objetivos vinculantes a la emisión de gases de efecto invernadero en la reunión de París?

Se espera que haya un contrato vinculante. Pero en el caso individual de cada Estado, no está claro aún qué nivel de compromiso seremos capaces de lograr. Lo importante es que será la primera ocasión en la que los Estados fijen sus propios objetivos. Qué puede o qué está dispuesto a hacer cada Estado es de por sí algo positivo. Ningún organismo externo puede obligar a un país a hacer algo. Por eso son importantes los compromisos individuales.

Hasta el momento, existen compromisos firmes de unos 40 países, la mayoría de ellos europeos. Los grandes contaminadores a nivel mundial, como la India o China todavía no se han decidido. ¿Se puede esperar algo aún?

Sí, habrá compromisos. El secretario general de la ONU ha pedido por escrito a sus líderes que informen acerca de sus compromisos. Recientemente hemos sabido que China presentará pronto sus objetivos. El resto de países hará lo propio. En la cumbre del G-7 de junio, por ejemplo, esperamos que lo hagan los miembros que aún no han comunicado sus intenciones.

¿Cuál es su estrategia de negociación? ¿No esperar grandes compromisos para que después la decepción no sea tan grande?

No, no es tan sencillo. Por supuesto que no queremos que las expectativas sean demasiado altas. Se trata de acordar un paquete de medidas en París. Cuatro componentes que están unidos entre sí. El objetivo es reducir los gases de efecto invernadero, algo que podría conseguirse por primera vez si todos los Estados se comprometen a lograrlo. El segundo es la naturaleza del propio contrato. ¿Podemos instalar sistemas de control? ¿Cómo podemos lograr que se cumpla el objetivo de limitar a dos grados el calentamiento global? Si continuamos como hasta ahora, la Tierra sufrirá el doble. El tercer punto es la financiación. Sin apoyo, los países en desarrollo no lograrán cumplir con su parte. Por último, el plan de acción. No valen sólo los compromisos verbales. Es necesario emprender acciones y lograr un mayor desarrollo tecnológico in situ. Si logramos combinación equilibrada de estos cuatro componentes, las negociaciones serán un éxito.